Apodos de Cehegín

Diccionario del Noroeste

Recorrido por mi pueblo

lunes, 13 de junio de 2016

Los puentes cehegineros (III).

Los puentes cehegineros (III)



Y continuamos como prometimos con otros puentes, no tan megalíticos pero que también son hijicos de Dios y que han tenido cierta importancia local, sobre todo para los agricultores locales: Por el paraje denominado "El Seco" encontramos el Puente de los Perifollosy el “Puente del Chirro o de los Muertos”, tendidos ambos para sortear la brecha de la vía férrea, ahora Vía Verde del Noroeste. El primero enlaza el camino viejo de Lorca que atraviesa el Quípar y más arriba hacia el Valle del Paraíso, y en la primera bifurcación coge el camino del Tollo a la Pollera, arriba cruza el Río Quípar y sube a la Casa de la Pollera.


Parece ser que el apelativo del puente venía vinculado al viejo Tío Perifollo, quien en cierta ocasión, sobre el 1750, sorteó un cordero para organizar una fiesta. Al parecer, se excedió en “emperifollar” al animal, de ahí el apodo. 

Restos P. Perifollos.
También contaban que en ese puente ahorcaron a un hombre. Cuando el tren marchaba por la mañana hacia Murcia, el maquinista divisó el cuerpo aún colgado y frenó el tren para que fuese recogido. Por ello también fue llamado el 'Puente del Ahorcado'.

'Puente del Ahorcado' o 'Perifollos' (Visita obras FC.)
En cuanto a la otra pasarela se le conocía como “donde le rezan a los muertos”, porque por allí nos encaminamos hacia el camposanto, se cruzaba una suerte de frontera hacia el más allá y existía la piadosa costumbre de parar unos instantes el séquito mortuorio para rezar un ‘estación’ y expresar el pésame a los dolientes. Las oraciones solían encauzarlas algunos santeros rezadores muy expertos en el tema, como José 'el Sillero', cuyo recuerdo se mantiene en una placa mamposteada en una fachada del lugar. 

Placa del 'Sillero'.
Los afligidos parientes y acompañantes formaban círculo alrededor del féretro e inmediatamente allí se despedía el duelo con un nuevo pésame, lo cual implicaba una reiteración que en algunas ocasiones era penosa, hay que tener en cuenta que además de la lógicas noches en vela durante la enfermedad, habitualmente los familiares habían de recorrer a pie tras el féretro hasta el cementerio.

Sepelio rezando en el Puente.
Esta misericordiosa práctica ha desaparecido debido a la instalación de los tanatorios locales en las afueras del casco urbano. Así mismo se le bautizó con el topónimo “Puente de los Chirros” aunque, en realidad el urbanismo ha enterrado también al célebre puente.

Puente del Chirro. (Hoy Vía Verde y parque infantil)
Cuenta la tradición oral que, al cruzar el río con algunos terneros, uno de los más pequeños quedó rezagado, el ganadero regresó cruzando el cauce a recoger “al asustadizo Chirrico”, lo cargó sobre sus hombros y lo pasó a la otra orilla. Desde entonces la gente lo señalaba como “el que cargó con el chirro”, en definitiva se le conoció como “el tío Chirro”. Y así ha quedado para la posteridad y para la saga familiar conocida como ‘los Chirros’.


Hoy, los respectivos carteles señalizadores indican oficialmente: Puente del Seco” y “El Chirro”. 
Seguro que se me habrá pasado algún otro puentecillo o pasarela por nuestras pedanías, por lo que nos comprometemos a rebuscar por los confines de nuestro municipio e informaciones de los pocos viejos que van quedando de la época antigua.

viernes, 10 de junio de 2016

PUENTES CEHEGINEROS ( II )

Los otros puentes ceheginenses. (II)

Panorámica del Puente del túnel
En la "1º Entrada" sobre los puentes ceheginenses referimos el carácter de Cehegín entre ríos, como una pintoresca Babilonia, en esta nueva entrada continuamos con otra tanda de viaductos de nuestro municipio: son dignos de reseñar los dos más grandes construidos en los años 20 del siglo pasado, para dar paso franco a la vía férrea entre Murcia y Caravaca, en la actualidad ruta usada como Vía Verde, una feliz alternativa para los amantes de la bicicleta y caminantes que buscan el sosiego de la naturaleza viva y la paz que se respira por nuestros valles y montes. 
Sobre el Argos hacia Caravaca a la salida del túnel del "Barranco del Saltaor", el megalítico puente destaca monumental, atravesando el anchurón del río, donde sigue exhalando la fertilidad de la huerta con varios nacimientos de agua para goce de las mariquitas y las ranas y que alimentan los heredamientos de las grandes acequias comarcales.

Brocal del azud cercano.
En cuanto al otro gran viaducto, su esbelta silueta destaca entre uno de los más bellos paisajes del río Quípar que discurre sosegado a la altura de las enigmáticas ruinas de la ciudad tardo-romana-visigoda Begastri, donde fue hallada la celebrada Cruz Monogramática al abrir brecha en el mismo corazón del cabezo de la sede episcopal para trazar el 'camino de hierro' hacia Murcia.

Monumental estructura de arcos de medio punto en Begastri.

 Un lugar de visitas para los curiosos de la arqueología y de paseo para los amantes de ‘la ruta del colesterol’. Lugares cercanos dan relieve al entorno como el meandro del río conocido como "Peña Amarilla" o la "Fuente del Abad", de la  que daremos noticias en otra entrada de este blog. Otro puente cercano con mucha historia es el que franquea la entrada a Cehegín salvando el río Quípar, el llamado Puente de Hierro, con influencias técnica de Gustav Eiffel.

Antigua foto con una galera que cruza el puente -Año 1900-

Nuestro "babilónico" Cehegín cuenta, así mismo, con el antañón "Puente del Santo", (denominado de esta forma por su cercanía con la ermita en ruinas de San Sebastián, antiguo santo patrón de la villa), construido sobre el año 1922, que enlaza con dos carreteras: la primera con diversas pedanías, principalmente Canara y la Virgen de la Peña, antigua patrona de Cehegín y la otra con la primitiva entrada a Cehegín, cuando no existían otros accesos y era obligatorio vadear el río y que conocemos como del ‘Agua Salada’, (donde se ubica la popular “Balsa Santanares” ¡Menudos capuzones nos dábamos en aquella gélida agua! que brotaba de una misteriosa alfaguara); por aquellos andurriales se acorta el recorrido hacia el "Barranco del Moro" y Calasparra. (Una antigua copla nos recuerda: "Por el Barranco del Moro viene una tropa...".)
Puente del santo. (al fondo el nuevo viaducto).
De reciente construcción es este nuevo y amplio viaducto de moderno diseño que ha colmado las aspiraciones de ese florido Edén que es Canara y aldehuelas cercanas.

Rotonda del Puente del Santo

Pero no todo queda aquí, pues en el siguiente artículo, el número tres del lote, recorreremos otros pequeños puentes que han hecho historia en Cehegín.