CRÓNICA DE UN JUEVES DEL AÑO DEL CATAPUM.
Por la puerta de los ‘Coleteros’ asoman dos notables músicos Jesús ‘el Pavo’ y Miguel Ródenas con sendos saxofones. Se dirigen hacia la Cuesta Moreno a la casona de don Antonio Melgares de Aguilar, sede de los ‘Coloraos’, dicen que esta noche van a echar el resto. San Pedro ya está dispuesto en la salida de la casa, justo frente a la de la popular practicante Paca Pérez, aunque ésta es de los ‘Blancos’. Saludan a Pepe ‘Tierra’ y a don Octavio que viene de afeitarse en la barbería del ‘Churrascas’, pues ha de presidir la procesión en calidad de juez de paz, junto al alcalde don Cristóbal.
Comentan que Juan Francisco ‘el Tomate’ aseguró ayer que los 'Moraos' van estrenar partitura: “El señor conde se la ha traído de Madrid y lleva un solo de requinto que va a interpretar Juanico Zarco, ese joven que quiere tomar los hábitos franciscanos”. Don Octavio replica que el coro de los negros estrena también otra marcha inédita: “...la ha conseguido el veterano fliscorno Antonio Noguerol de un joven compositor valenciano. Se titula ‘Los trece negros’ en honor de los trece componentes del coro”. (A estas pequeñas bandas de la cofradías, siempre se le denominó “coros”).
Algunos componentes de 'los trece negros'. |
Se interrumpe la conversación porque aparece en el portal de su casa don Juan Marín, presidente de los ‘Negros’, engalanado con su túnica brocada con hilos de oro, evoca la imagen de un preboste del Renacimiento. Allí se encuentra cobijada ‘La Dolorosa’ para ser transportada por los diez anderos capitaneados por el ‘Rojo el Punchas’ y los hermanos ‘Torraos’, hasta la Magdalena, desde donde saldrá la procesión para hacer el tradicional itinerario conocido como ‘El ocho’. Estos anderos ya han sido debidamente alimentados con una copiosa sartenada de huevos fritos con patatas y vino a norre, además de unos dulces de Motolite regados con Revuelto del Tarato.
Las hijas de don Octavio, ‘Lele’ y ‘Titi’, están en su puerta también acicaladas y dispuestas. De la casa-palacio de don Amancio también aparece ataviada como una cortesana doña Pura, que presidirá las Manolas de Jueves Santo, un ramillete de bellas damas cehegineras que emperifolladas con mantones negros colgados de refulgentes peinetas participan en la procesión.
Manolas de jueves santo. |
Por los cuatro costados del Mesoncico van apareciendo nazarenos y músicos, el ambiente se llena de colorido. De pronto se oye el eco lejano de un pasacalle y al cabo de un rato asoman por la casa de jaspe los trece negros desfilando marcialmente al compás del pasodoble Churumbelerías, la música envuelve como un sutil celofán las fachadas con una sonoridad radiante y sumamente afinada, tanto que dejan boquiabiertos a los presentes que ya se van congregando en la ‘vieja república’ del Mesoncico.
Pepe ‘Tierra’ se frota las manos pues todo augura gran competencia entre los músicos participantes, la pugna está en marcha, sólo habrá que aguardar a que finalice la procesión para escuchar ante la puerta del Casino las diversas interpretaciones que emocionarán al numeroso público congregado, quien emitirá su veredicto con los aplausos.