LA CRUZ DE LA DONCELLA.
Cuántos parajes hermosos y a su vez llenos de poesía y misterio se esconden por nuestra tierra. Así es este lugar situado en una encrucijada del camino que conduce a la Fuente
de Juan González y al Parque Ecológico de las Maravillas, muy cerca de la mina
de Capel o Edisson donde se haya este letrero del título de esta entrada.
Se trata de una leyenda muy antigua, cuando estos caminos todavía de
herradura se utilizaban para el pastoreo, y donde los arrieros cruzaban con sus
carretas hacia lugares lejanos, luchando por antiguas veredas con animales de
carga que se dirigen al poblado minero de Gilico y finalmente a la ciudad de
Cieza, o sabe Dios adonde.
Por esos andurriales entre cabezos y pequeños montes, se
cuenta esta triste historia, referida a una joven pastorcilla, natural de Bullas, que
guardaba un rebaño de ovejas, cuando una fuerte tormenta con aparato eléctrico,
descargo un rayo que la fulminó; pero para más incógnita hay otra versión que relatan viejos del lugar: "... allí pasó un terrible crimen, viajaba un
arriero que se encaminaba a Cieza, y le llamó la atención la lozana
hermosura de la zagala. ante lo cual
afloró el deseo lujurioso del individuo, un desalmado sin escrúpulos que perdió
el poco juicio que poseía e intentó violarla. La muchacha se defendió con todas
sus fuerzas, ante esta oposición, el arriero forzó la situación con tal
brutalidad que la asesinó."
Ante esta desgracia, alguien que conoció el drama, construyó una cruz con
dos ramas de un árbol, atravesadas y atadas con una soga, que fue
clavada en el lugar donde perdió la vida la infortunada "Doncella”.
A partir de entonces, al igual que en torno a otras
desgracias o accidentes, se suele colocar en el lugar una lápida, un ramo de flores o una
corona, en este caso los viandantes ofrecieron un singular homenaje a la pastorcilla: fueron colocando piedras junto a la cruz,
que con los años han ido formando un pequeño montecillo en el entorno y que hoy
podemos ver si pasamos por el camino.
En recuerdo de aquel luctuoso suceso, se conserva un cartelón
indicando toda esta misteriosa leyenda, donde reza un pequeño verso que advierte: "...Por este lugar que has de pasar, una piedra has de dejar...l"Nota: Algunos datos recogidos de la tradición oral y publicaciones entre ellas, 'Cehegin, Magia y Misterio' de F.º Ortega Bustamante.